Hágase tu voluntad

Tomas decisiones, eliges entre varios senderos. Pero, en realidad, todos los caminos te llevan al mismo lugar. Todos los ríos van a dar a la mar. 

¿Qué significa tu caminar junto al formidable movimiento del universo que te lleva con él?. Crees que tu voluntad es omnipotente. Eres importante porque tú decides. Pero ¿qué representan tus afanes junto a esa descomunal decisión del Mundo de girar?. 

Tus dos hijos son dos seres magníficos, irrepetibles. No existirían si cualquiera de las decisiones tomadas por ti a lo largo de tu vida, o de las condiciones impuestas desde fuera, hubiera sido distinta.  Si no te hubieran trasladado en tu trabajo, no habrías residido  en Cádiz. No habrías conocido al compañero de clase que te presentó posteriormente, en el Algarve, a la que iba a ser madre de tu descendencia. Es más, si aquellas noches a tu esposa le hubiera dolido la cabeza, serías padre seguramente, pero de otros retoños.

Mas sean cuales sean tus elecciones; sean cuales sean tus caminos, sean cuales sean los pasos que des en tu deambular, no puedes avanzar mucho: sólo puedes progresar una generación. 

Era eso la voluntad del Padre!